En Guatemala, básicamente los pasos cebras sirven para que las personas crucen calles o avenidas no transitadas porque de lo contrario los automovilistas no paran.
Esta situación, varias veces puesta en evidencia por extranjeros, no me parecía tan exagerada hasta que hice yo misma la prueba. Un día caminando por la zona 14, donde al parecer vive la gente más culta del país —y digo al parecer, porque de cultura automovilística nada de nada—, crucé por un paso cebra frente al hospital La...
En Guatemala, básicamente los pasos cebras sirven para que las personas crucen calles o avenidas no transitadas porque de lo contrario los automovilistas no paran.
Esta situación, varias veces puesta en evidencia por extranjeros, no me parecía tan exagerada hasta que hice yo misma la prueba. Un día caminando por la zona 14, donde al parecer vive la gente más culta del país —y digo al parecer, porque de cultura automovilística nada de nada—, crucé por un paso cebra frente al hospital Las Américas (frente a un ¡hospital!) y si no es porque corrí como si fuera a ganar la medalla de los 100 metros casi que voy yo misma a parar al hospital porque los carros no pararon. Ni siquiera puedo decir que hicieron el intento de disminuir la velocidad. Es más, hasta tuve la sensación de que aceleraron.
Continúo con la prueba en 7ª avenida y calle Martí, zona 2. Hay un momento en que los automóviles de la Martí están parados por el semáforo, pero el de la 7ª avenida, con un nivel menor de tránsito vehicular, tiene luz verde para tomar la calle Martí hacia el Atlántico o hacia el Periférico (es el único momento en el que se puede atravesar la calle Martí). Nuevamente, la situación es desesperante: tengo que esperar durante varios semáforos porque pese a que los carros están cruzando a baja velocidad, no paran frente a un transeúnte, simplemente lo ignoran.
Finalmente, se me complica aún más la situación, los buses que transportan a los militantes y simpatizantes del partido Líder, que ese día llevó a cabo su asamblea en el parque central, son aún más irrespetuosos y hasta se pasan los semáforos en rojo, por lo que las posibilidades de atravesar son cada vez más complicadas (y pensar que estas personas quieren llegar al poder…).
Finalmente, desisto del paso cebra y opto por tomar la pasarela unas cuadras adelante.
A lo que quiero llegar con este pequeño experimento no es solamente a la falta de cultura automovilística del guatemalteco y al poco respeto hacia el peatón, es a la falta de solidaridad que existe en nuestro país. A la persona que va en su automóvil no le importa el mundo y sus habitantes. Pero obviamente esto ocurre en todos los niveles: la poca solidaridad, la insensibilidad, el individualismo, el abuso, son características enraizadas en nuestra sociedad. No creo que sea un problema de educación (véase ejemplo zona 14), tampoco de falta de cultura democrática y política (véase ejemplo partido Líder). Es un problema social, histórico, en donde la solidaridad y el respeto hacia el otro han sido los valores menos inculcados y hasta refutados.
Pareciera que los lazos que nos unen a las y los guatemaltecos son cada día más débiles… si es que alguna vez existieron. Y si fueran los Beatles, ¿pararía o se los pasaría usted llevando?
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