Dicen que compararse con otras personas es malo. Pero si la comparación viene del exterior (es decir, de terceros) y evita ser en extremo opuesta y surge sin mala intención, entonces los resultados pueden ser beneficiosos y motivadores.
En ese sentido, como a Mujica no se le ha ocurrido compararse con Portillo y a Portillo no se le ha ocurrido compararse con Mujica (ambos expresidentes), me atrevo a realizar el ejercicio a nivel general.
Parto del conocimiento general que tenemo...
Dicen que compararse con otras personas es malo. Pero si la comparación viene del exterior (es decir, de terceros) y evita ser en extremo opuesta y surge sin mala intención, entonces los resultados pueden ser beneficiosos y motivadores.
En ese sentido, como a Mujica no se le ha ocurrido compararse con Portillo y a Portillo no se le ha ocurrido compararse con Mujica (ambos expresidentes), me atrevo a realizar el ejercicio a nivel general.
Parto del conocimiento general que tenemos de América Latina para confiar en reconocer los retos regionales, así como las evidentes diferencias entre Uruguay y Guatemala. Basta con comparar los datos sociodemográficos para ir con cautela en nuestra apreciación.
Contrastando varias fuentes confiables en la Web, traigo unos pocos datos de ambos expresidentes:
José Mujica
- Nació el 20 de mayo de 1935 en Montevideo, Uruguay. De origen humilde, realizó sus estudios en un liceo público. Se inscribió en Derecho, pero no terminó el ciclo. De joven ejerció liderazgo político. Pasó alrededor de 15 años en prisión. Luego de su liberación fundó, junto con otros miembros, el Movimiento de Participación Popular. Fue elegido diputado, senador y luego presidente de Uruguay, cargo que ocupó desde el 1 de marzo de 2010. El mismo día y el mismo mes, pero de 2015, dejó su cargo público y regresó a la casa de 45 metros cuadrados donde residió durante su mandato constitucional. Ahora tiene más tiempo para el cultivo y la venta de flores, pues así es como se gana la vida. Los medios de comunicación han destacado la modestia de su hogar, su sencillez de vida, el Volkswagen modelo 1987 declarado como fortuna personal y que del sueldo que recibía como presidente donaba el 90%.
Alfonso Portillo
- Nació el 24 de septiembre de 1951 en Zacapa, Guatemala. De residir en Guatemala se fue a México, donde se le conoce un episodio relacionado con armas de fuego, motivo por el cual regresó a Guatemala. Cursó en México estudios de Ciencias Jurídicas y Sociales (UAG) y una maestría y un doctorado en Ciencias Económicas (UNAM). Fue representante del Congreso, jefe de bancada y presidente de varias comisiones. El 14 de enero de 2000 tomó posesión como presidente de Guatemala, cargo que ocupó hasta el 14 de enero de 2004. En ese tiempo fue acusado de corrupción y malversación de fondos, por lo que huyó a México. En octubre de 2008 fue juzgado en Guatemala. El 24 de mayo de 2013 fue extraditado a Estados Unidos por lavado de dinero. Estuvo en prisión casi dos años y recién regresó al país el miércoles 25 de febrero. Portillo dijo en conferencia de prensa que viene como «el hijo pródigo», que «el país no va bien» y que «es necesario y urgente un cambio de rumbo».
En definitiva, a Mujica lo conocen mediáticamente como el que fuera el presidente más pobre del mundo.
A Portillo no hay necesidad de buscarle títulos, pues él mismo se declaró culpable del delito de lavado de dinero (2.5 millones de dólares). Por lo tanto (como si fuera concurso), podemos decir que a Portillo se le conoce como el que fuera el presidente más... ¿? Se aceptan sugerencias.
La intención al comparar es buscar el lado positivo y que sirva de motivación para nuestros políticos. Las preguntas pertinentes serían qué pueden aprender los políticos de Guatemala de la vida y el trabajo del expresidente José Mujica y, con tal de equilibrar la balanza, qué pueden aprender los políticos de Uruguay de la vida y el trabajo del expresidente Alfonso Portillo.
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