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Todos los senderos pasan por el Congreso

Tipo de Nota: 
Opinión

Todos los senderos pasan por el Congreso

01 de Abril de 2017

Es cierto que las interpelaciones —como institución— son necesarias para un sistema de contrapesos que aspira a ser democrático y republicano. Lo mismo sucedería con figuras como el antejuicio, la acción de amparo o el sindicalismo. Pero más cierto es que, pasada la letra muerta, un Parlamento legitimado por sus propias acciones es la piedra filosofal de toda república social de derecho. Un Congreso roto es un país roto.

Si nuestra asamblea legislativa está infectada hasta las entrañas, todos sus actos son antidemocráticos y antirrepublicanos. Pero, dado que en Guatemala somos más afines a la forma que al fondo, entre tanta palabrería y despotismo burocrático no es raro que nos perdamos el mensaje. O la intención. Por eso las interpelaciones suelen desvirtuarse como rifles de cacería política, los antejuicios fácilmente se usan como buffer para robar, matar y destruir, los amparos son reducidos a ...

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